Eran las ocho de la tarde y las puertas del Santuario de la Virgen de la Paz se abrían para dar paso a la historia. María Santísima de Caridad y Esperanza salía por la calles de Ronda por primera vez, y desde el momento en que cruzó el dintel de la puerta empezó a oír piropos que no dejó de escuchar hasta llegar a Santa Cecilia. GUAPA… PRECIOSA… QUÉ BONITA VA… QUE BIEN LA LLEVAN… Y lágrimas… Muchas lágrimas de personas que recibían con ardiente y reciente devoción a su nueva madre, muchos sentimientos agolpados en un llanto sincero y ofrecido a Ella. Cómo estaban las calles de Ronda… Por los sentimientos que se respiraban por las calles, parecía que Caridad y Esperanza llevara en Ronda no cincuenta ni cien, sino cientos de años y que era la verdadera reina de Ronda.
Un día para la historia en el que Ronda se echó a la calle para recibir con el mayor cariño y amor a su Santa Madre de Caridad y Esperanza…
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| La Patrona le da su bendición |
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| Por las callejuelas de Ronda |
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| Entre la Multidud |
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Todos somos tu Caminar
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| Y el puente te estaba esperando |
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| Eres la luz que nos ilumina en la noche |
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| Y ronda te esperaba para recibirte con su fervor |
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| A tus planta Señora |
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